Cuadros decorativos

• Dar color a la habitación. Cuando elegimos un lienzo, este debe combinar a la perfección con el resto de la decoración, con esto se logrará resaltar la armonía de la estancia.
• Lograr sensación de amplitud espacial. No se necesita poner demasiados cuadros y saturar la habitación, basta con elegir un lienzo grande y llamativo. También funciona como recurso visual de amplitud cubrir un espacio con pequeños cuadros para lograr un efecto aleatorio.
• Mantener un estilo personal. La casa brindará las pautas para elegir el cuadro, recuerde que todo está en el balance entre la habitación y el cuadro. Por ejemplo, si la madera predomina como elemento de la vivienda, lo más recomendable es no utilizar marcos de madera para no abusar de este material. Si por el contrario se trata de un espacio muy sobrio y minimalista, un marco decorativo de un color que contrastante puede darle calidez a un espacio.

Los cuadros pueden utilizarse para complementar o contrastar con otros elementos decorativos, para crear una atmósfera específica o para resaltar una pieza de arte. Además, pueden ser utilizados para llenar espacios vacíos en una pared o para enmarcar vistas importantes dentro de una habitación.